Billetes valen más que la cifra que llevan impresa

viernes 28 de agosto, 1998
Andrés Correa Guatarasma El Universal

Por primera vez el Banco Central de Venezuela muestra públicamente su atesorada colección de billetes de 79 naciones del mundo
El papel moneda tiene mucho que contar

UN RECORRIDO por dos siglos de historia y cinco continentes confirma que los billetes valen más que la cifra que llevan impresa

‘Si te detienes a ver, cada billete es una belleza’, comenta la curadora de la muestra, Graciela Rebolledo, toda una biblia autodidacta en filatelia y numismática
),(Foto Venancio Alcázares)

Andrés Correa Guatarasma

El Universal

Caracas.- ¿Alguna vez se ha tomado tiempo para detallar sus billetes de uso diario? ¿Ha reparado en el diseño casi de filigrana, la cantidad de detalles de alto y bajo relieve, los diversos tonos de tinta, las degradaciones de colores, los fondos litográficos e hilos holográficos de seguridad, los iconos y las microimpresiones?

A primera vista o a trasluz, con o sin lupa, o simplemente al tacto, los billetes, desde su origen en el siglo VII, se revelan como verdaderas obras de arte. De hecho, hay gente que dedica su vida al descubrimiento, colección y estudio de estos papeles de cambio, confirmando que valen mucho más que la denominación impresa.

Y si alguien sabe de ello es Graciela Rebolledo, curadora de la exposición ‘Billetes del mundo’, en la que por primera vez el BCV muestra públicamente esta parte de sus tesoros numismáticos, pues hasta ahora sólo había expuesto su colección de monedas. ‘Si te detienes a ver, cada billete es una belleza’, comenta la curadora.

Uno a uno y con manos enguantadas, Rebolledo seleccionó los billetes y categorizó la muestra, procurando amplitud geográfica y variedad de diseños. Claro, también era muy importante que estuviesen bien conservados y lo siguieran estando, ya que se trata de obras ‘acostumbradas’ al silencio al permanecer protegidas en álbumes, plastificadas y guardadas en bóvedas, por lo que hacía mucho tiempo no les pegaba ningún tipo de luz. Y una vez que se desmonte la exposición, volverán al manto protector que les brinda la oscuridad.

Fuera de circulación

Tan peculiar exposición forma parte del programa ‘Descubriendo nuestros tesoros’, ideado por el BCV como una manera de mostrar al público, más allá de las visitas guiadas estudiantiles, sus valiosísimas colecciones filatélicas, plásticas y numismáticas. En esta oportunidad, los billetes ocupan en el edificio del BCV el espacio que tradicionalmente plenaba la exposición de monedas. Se prevé que una vez que concluyan las obras de la plaza que se está construyendo frente al Ministerio de Educación, haya salas acondicionadas para mantener muestras públicas más amplias y permanentes, pues la falta de espacio obligó a Rebolledo a restringir los criterios a la hora de seleccionar los billetes a mostrar.

Dividido en cinco continentes, y con una vitrina especial para Venezuela, el recorrido ‘Billetes del mundo’ es un paseo por papeles moneda históricos, pues la mayoría ya está fuera de circulación, lo que aumenta considerablemente su valor. Los más antiguos son europeos, emitidos a finales del siglo XVIII. En general toda la muestra internacional proviene de los programas de intercambio que el BCV ha mantenido desde hace décadas con los bancos centrales de casi 80 países del mundo, y que ha organizado como tesoro desde que en 1956 creara su unidad numismática.

En el caso venezolano los más añejos datan de 1811, cuando Francisco de Miranda introdujo en pleno gobierno republicano los primeros billetes. A partir de allí, la muestra permite apreciar la evolución en tamaño y diseño del papel moneda venezolano, antes y después de que Guzmán Blanco decretara el bolívar como unidad monetaria. En ese marco, resulta particularmente curioso apreciar muestras de viejas emisiones acreditadas por el Banco Caracas, el Banco de Venezuela o el Venezolano de Crédito, producidas cuando el BCV aún no se había oficializado como el único emisor autorizado de dinero.

Tras asumir esas funciones, el BCV ha atesorado no sólo el papel moneda emitido para la circulación cotidiana, sino también las ediciones conmemorativas, de insuperable valor artístico y para el coleccionismo, al coincidir con la celebración de aniversarios de nacimientos y muertes de próceres o fundación de las ciudades más importantes del país.

Ver también:

Billetes con diseños experimentales

La dama del dinero

Ver noticia en: http://universal.eud.com/1998/08/28/28374AA.shtml